El ministro de Finanzas de Chile, Felipe Larrain, afirma que un grupo de instituciones estatales “está progresando” en el desarrollo de la regulación de criptomonedas, informa el diario local La Tercera el viernes 7 de diciembre.
Según Larrain, el Ministerio de Finanzas está trabajando con el banco central de Chile y la Junta de Estabilidad Financiera para proporcionar un marco legal equilibrado para la industria de criptomonedas. Señaló que las regulaciones de criptomonedas son solo un aspecto de un proyecto más amplio para proporcionar definiciones legales para el sector de la tecnología financiera. Larrain señaló que la regulación de criptomonedas podría llevar tiempo:
“Somos conscientes de que es importante moverse en esta dirección. Pero todos los países del mundo enfrentan problemas similares [con la regulación de criptomonedas], y no hay una varita mágica para resolverlos. Estamos explorando las mejores soluciones para ver cómo regular este fenómeno completamente nuevo”.
En marzo, luego del cierre de las cuentas de criptomonedas para negocios en los principales bancos chilenos, Larrain prometió desarrollar un marco legal para normalizar la situación. Sin embargo, nueve meses después, no se ha presentado tal legislación, aunque el parlamento chileno ha hecho algunas incursiones en la regulación de la tecnología de blockchain.
La reciente declaración de Larrain se produce poco después de una decisión del Tribunal Supremo de Chile, donde se anuló un fallo previo de un tribunal antimonopolio para proteger a la casa de cambio de criptomonedas local Orionx y para reabrir sus cuentas bancarias. En la decisión, un juez afirmó que las criptomonedas “no tienen manifestación física ni valor intrínseco”.
A pesar de las alarmantes publicaciones en los medios locales, los empresarios que usan criptomonedas en Chile le dijeron a Cointelegraph que la nueva decisión no tiene nada que ver con prohibir los cambios de criptomonedas.
Tanto Orionx como Buda.com, que han estado involucrados en una batalla legal desde marzo, aseguran que sus cuentas bancarias no se verán afectadas, ya que la decisión del tribunal antimonopolio aún está en vigor.